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El mundo de las finanzas es, sin duda, uno de los que más transformaciones ha experimentado con la era digital. El auge de las fintechs y la rápida adopción de diversas tecnologías para realizar pagos, obtener créditos, invertir, entre otras actividades, han revolucionado el panorama de la banca tradicional.
En el contexto de los continuos avances en las tecnologías de internet, este proceso de transformación promete continuar durante mucho tiempo. Con ello, se vislumbra una evolución aún más profunda en la disponibilidad de medios de pago. A medida que los consumidores optan por opciones más seguras, cómodas y personalizadas y las empresas multiplican las alternativas para satisfacer estas necesidades de forma oportuna.
Si deseas conocer cuáles son las tendencias de pago con mayor potencial de crecimiento para los próximos años, sigue leyendo. A continuación, te presentamos algunas de las más relevantes, a las que conviene prestar atención para estar al corriente de lo que nos depara el futuro de los medios de pago.
En el contexto de la pandemia del Covid-19, se presentó una revolución para el comercio electrónico. Esta tendencia impulsó la diversificación de formas de pago sin efectivo. Con ello, no solo incrementó el uso de tarjetas de crédito, también, los dispositivos móviles, códigos QR, mensajes de texto, e-wallets, entre otros, se convirtieron en medios de pago habituales y accesibles para el público en general.
La proliferación de mecanismos para realizar pagos y su adopción por parte de los negocios fuera de Internet está impulsando la tendencia global hacia una sociedad en la que el uso de dinero en efectivo será cada vez menos frecuente. Diversas proyecciones indican que, para el año 2030, los pagos electrónicos llegarán a triplicarse, alcanzando un volumen de operaciones de tres billones de dólares, lo que transformará significativamente la economía y la manera en que interactuamos con los servicios financieros.
La transición hacia una era con cada vez menos dinero en efectivo será impulsada por los pagos electrónicos, que sin duda se convertirán en los medios de pago del futuro gracias a su conveniencia y seguridad. Las carteras digitales o e-wallets permiten almacenar diferentes medios de pago en tus dispositivos móviles. Con el desarrollo de tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT) y los sistemas biométricos, y la creciente disponibilidad de dispositivos para realizar pagos, será posible salir de casa prácticamente sin dinero en efectivo y realizar compras de manera conveniente y segura.
Diversas proyecciones señalan que, en los próximos años, el desarrollo del IoT ampliará la capacidad de realizar transacciones, y los medios de pago del futuro incluirán automóviles, relojes, accesorios e incluso electrodomésticos. Además, gracias a la tecnología biométrica, podríamos contar con medios de pago integrados en nuestro propio cuerpo, utilizando el reconocimiento facial, el escaneo de iris y hasta la identificación de la palma de la mano. Esto contribuirá significativamente a la creación de un ecosistema de pagos integrado y omnipresente, donde cada dispositivo conectado tendrá el potencial de convertirse en un punto de venta.
En un futuro donde la practicidad y la conveniencia predominarán, los métodos de pago sin fricciones serán los que prevalezcan. Esto se combinará con la creciente adopción de pagos electrónicos, lo cual impulsará el desarrollo de métodos de autenticación y seguridad más eficientes y accesibles, eliminando las barreras asociadas a la introducción de datos financieros sensibles en cada transacción.
La tokenización jugará un papel fundamental en este avance. Este proceso implica reemplazar los datos financieros sensibles con tokens únicos para cada entorno de pago. Generados por proveedores de servicios de pago autorizados, estos tokens garantizan la seguridad de la información durante todo el proceso de compra, tanto en línea como en puntos de venta físicos. Esto facilita la adopción de pagos sin fricciones de manera segura y eficiente, proporcionando una capa adicional de protección y simplificación en el flujo de transacciones.
Este enfoque no solo fortalece la seguridad al proteger los datos financieros, sino que también mejora la experiencia del usuario al eliminar la necesidad de ingresar información sensible repetidamente. Esto promueve una interacción más fluida y confiable en todas las plataformas de comercio, preparando el terreno para una integración más amplia y segura de estas tecnologías innovadoras en el futuro del mercado global.
La globalización y la expansión internacional de un número creciente de empresas han provocado un aumento significativo en los pagos internacionales. Se espera que esta tendencia continúe en los próximos años a medida que se reduzcan las barreras relacionadas con costes y tiempo, y mejoren las regulaciones y los acuerdos entre países para facilitar las transacciones bancarias transfronterizas.
En la actualidad, se están llevando a cabo diversas iniciativas para facilitar esta evolución. Por ejemplo, la Unión Europea está en proceso de negociación de iniciativas destinadas a consolidar la creación de un mercado de pagos integrado en la región. Esto incluye la implementación de un monedero digital y tarjetas que conecten la Zona Única de Pagos en Euros (SEPA). Además, nivel global, la integración de medios de pago alternativos como las criptomonedas está comenzando a simplificar las transacciones internacionales al reducir costes y la dependencia de intermediarios
Esperar días e incluso semanas para recibir o realizar un pago es cosa del pasado gracias al Open Banking. Este concepto se refiere a la práctica de compartir datos financieros de manera estandarizada y segura entre instituciones financieras mediante APIs e interfaces abiertas, lo cual facilita la transferencia segura de pagos de manera inmediata.
El Open Banking no solo garantiza mayor seguridad y transparencia, sino que también reduce los costes de transacción y la carga de procesamiento. En la actualidad, ha facilitado una expansión significativa de los pagos instantáneos. En España, por ejemplo, casi la mitad de las transferencias nacionales (47%) se realizan de forma inmediata, con un volumen total de 83.997 millones de euros. Esta tendencia augura continuar creciendo, anticipando un futuro donde todas las transferencias y pagos serán instantáneos.
En el ámbito de los medios de pago alternativos, además de los monederos digitales y los pagos móviles, las criptomonedas y las monedas digitales emergen como catalizadores prometedores de cambio. Este sector, con un desarrollo volátil pero sólido en los últimos años, anticipa un futuro de innovación y oportunidades. Se espera que las criptomonedas se consoliden como una fuerza disruptiva en el ámbito financiero, respaldadas por un aumento en garantías y regulaciones.
Una transformación clave en el panorama de las monedas digitales será la implementación de las monedas digitales de los Bancos Centrales (CBDCs). Varios bancos centrales, incluida la Reserva Federal de los Estados Unidos, consideran introducir su propio efectivo digital para afirmar su soberanía. Las CBDCs ofrecen la rapidez y beneficios de las criptomonedas, mitigando riesgos gracias a un marco regulatorio más sólido. Numerosos países exploran activamente estas iniciativas, que abarcan más del 98 por ciento de la economía global.
Esta transformación refleja un cambio en el escepticismo inicial de los bancos centrales hacia las criptomonedas impulsadas por el sector privado. Este cambio ha llevado a que grandes actores financieros como Mastercard y Visa adopten una postura más receptiva, preparándose para facilitar la integración y futuro en el que el uso generalizado de estos medios de pago digitales sea la norma.
Junto con el crecimiento de los métodos de pago digitales, han surgido nuevos desafíos tanto para empresas como para usuarios, siendo la seguridad uno de los más urgentes. El aumento considerable de los pagos en línea ha traído consigo un notable incremento en los fraudes y una evolución en las modalidades de estafas y violaciones de datos personales. Por tanto, con la expansión continua de los métodos de pago, la seguridad y la prevención de fraudes se perfilan como temas clave para el futuro de los medios de pago.
La protección de la información personal será fundamental para el éxito de los medios de pago basados en tecnologías digitales. En este sentido, en los próximos años se anticipa una búsqueda constante de soluciones innovadoras para garantizar la seguridad en las transacciones y proteger la confidencialidad de la información personal.
Tecnologías como el cifrado de extremo a extremo, el almacenamiento seguro y la autenticación multifactorial están siendo ampliamente adoptadas. Además, adoptar un enfoque proactivo y dinámico en ciberseguridad se convertirá en uno de los principales desafíos para bancos, fintechs y administradores de activos al implementar estrategias tecnológicas integrales.
En los próximos años, las empresas experimentarán una revolución en las opciones de métodos de pago disponibles, lo que conllevará numerosos retos y oportunidades. En este entorno, será crucial mantenerse competitivo al estar al tanto de esta evolución y aprovechar aquellos métodos que aporten mayores beneficios tanto para ti como para tus clientes.
Por ello, es importante que comiences desde hoy a familiarizarte con la diversidad de métodos de pago disponibles y empieces a aprovechar sus beneficios en términos de seguridad y mejor experiencia de usuario de los medios de pago del futuro. En Checkout.com, podemos apoyarte en este proceso de exploración.
Nuestra plataforma de pagos permite acceder a una amplia gama de métodos de pago, respaldados por avanzados protocolos de verificación de clientes que incluyen la autenticación multifactor para aprobar los pagos. Además, disponemos de una robusta herramienta de detección de fraudes que utiliza tanto el aprendizaje automático como reglas flexibles para combatir la actividad delictiva y mejorar los índices de aceptación.
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