Un procesador de pago es una de las entidades clave que los negocios necesitan para aceptar pagos con tarjeta de sus clientes.
En términos simples, un procesador de pago transmite los datos de las transacciones entre el comerciante, el adquirente y las redes de tarjetas.
Sin embargo, no todos los procesadores de pago son iguales, y es importante tomarse el tiempo para encontrar uno que ofrezca funcionalidades y tarifas compatibles con las necesidades de tu negocio.
En este artículo, explicamos cómo funciona el procesamiento de pagos, las tarifas de los procesadores de pago, y qué factores debes considerar al elegir un proveedor.
Un procesador de pago es un servicio digital que facilita la transferencia de dinero entre el comprador y el vendedor en una transacción en línea.
Este sistema actúa como intermediario en el procesamiento de un pago global, conectando al banco del comprador con el banco del vendedor para completar la transacción de manera segura y rápida. Sin él, los negocios en línea no podrían ofrecer transacciones instantáneas, lo que limitaría las opciones de pago online para los clientes.
El procesador de pagos cumple varias funciones clave, desde verificar la autenticidad de los datos de pago hasta asegurar que los fondos sean transferidos correctamente al comerciante. Entre las principales funciones destacan:
Las empresas de procesamiento de pagos ejecutan una serie de pasos complejos en cuestión de milisegundos para que las transacciones se procesen de manera casi instantánea. A continuación, se explican cada una de las etapas que garantizan un flujo de pagos online seguro y eficiente:
Cuando el cliente introduce sus datos financieros en la página de checkout y confirma la compra, el procesador recibe estos datos y los envía al banco emisor del cliente (el banco de la tarjeta o cuenta utilizada). Durante esta solicitud, la información sensible se cifra para proteger los datos personales y financieros del usuario.
Una vez que el banco emisor recibe la solicitud de pago, analiza los datos y decide si aprueba o rechaza la transacción. El banco revisa factores como la autenticidad de la tarjeta, la disponibilidad de fondos, y si la transacción presenta algún riesgo potencial de fraude. Si el banco autoriza el pago, envía una señal de aprobación al procesador; de lo contrario, emite una negativa.
Con la aprobación obtenida durante el procesamiento de pago en línea, se inicia la transferencia de fondos desde la cuenta del cliente a la cuenta del comerciante. Esta operación puede involucrar a otros intermediarios financieros, como redes de tarjetas (Visa, Mastercard) o bancos adquirentes que facilitan el paso de dinero.
Aunque el dinero suele aparecer casi inmediatamente en la cuenta del comerciante, en realidad, los fondos se liquidan en el backend en un plazo determinado, según el acuerdo entre bancos y procesadores.
El siguiente paso del procesamiento de pagos en línea es el envío de una notificación al comercio y al cliente. El cliente ve un mensaje de éxito o fallo en la pantalla de checkout, mientras que el comercio recibe una actualización en su sistema que confirma que el pago se procesó correctamente. Esta confirmación es fundamental para que el comercio pueda proceder con el envío del producto o la activación del servicio adquirido.
Este proceso garantiza que las transacciones se realicen de manera rápida, segura y confiable, permitiendo que tanto clientes como comercios tengan una experiencia de pagos fluida.
Elegir el procesador de pago adecuado es una decisión clave que afecta la seguridad, los costos y la experiencia de compra de los clientes. Existen varios factores esenciales a considerar:
Los comercios deben pagar tarifas por cada transacción, que cubren los costos de mantenimiento de la infraestructura de pagos, seguridad y verificaciones de autorización. Las tarifas principales incluyen:
Aunque muchas veces se usan como sinónimos, un procesador de pago y una pasarela de pago tienen funciones distintas. La pasarela de pago actúa como una “puerta” que recoge los datos de pago del cliente y los transfiere al procesador, que a su vez se comunica con las instituciones bancarias para autorizar y completar la transacción.
Sí, Checkout.com es un procesador de pago, pasarela de pago y adquirente. Ofrece una solución integral de extremo a extremo que permite procesar transacciones de forma más rápida, con menor tiempo de inactividad y mayor precisión, lo que ayuda a los comercios a aumentar sus tasas de aceptación y potenciar su crecimiento.
Además, como procesador de pagos, Checkout.com aplica reglas de prevención de fraude en todo el flujo de pago para asegurar que cada transacción sea legítima y segura.